Cuidar Mariposas

“Ariana encontró en el suelo un capullo y para que nadie lo pisara, se lo llevó a casa, lo puso en una cajita con algodón para mantenerlo caliente y esperó pacientemente a ver qué pasaba. Aunque la espera se hacía larga, en su cabeza, podían más la ilusión y las ganas de ver qué ser saldría de “su” capullo que el tedio de esperar.

 

 Un día vio que el capullo empezaba a moverse, Ariana, ansiosa y expectante se quedó mirándolo con toda atención. Poco a poco, apareció un pequeño orificio. La niña vio asomar algo y durante horas contempló con ansia como la mariposa trataba de salir, hasta que llegó un momento en que la frenética actividad cesó. Ariana pensó que la pobre mariposa no podía más y quiso ayudarla y ahorrarle el sufrimiento. Cogió un cuchillo y acabó de rasgar el capullo para que pudiese salir libremente. Aliviada, Ariana vio como asomaba un cuerpecito hinchado y unas alas pequeñas y marchitas, ¡ya estaba! Ariana esperaba que en cualquier momento la mariposa desplegara sus alas y echara a volar, pero nada de eso sucedió… esa mariposa jamás pudo volar.” 

 

¿Qué pasó? ¿Por qué la mariposa no pudo volar? Resulta que el esfuerzo que hacen las mariposas por salir por el diminuto agujero es parte natural de su proceso, con este trabajo consiguen que las alas se irriguen y alcancen el tamaño y fortaleza necesarios para volar.

 

No sé cómo te has quedado al leer este cuento, a mí es una historia que me impacta mucho, ya cuando la escuché, siendo niña, me tocó y me doy cuenta de que sigue impactándome… 

 

Si te sientes removidx, te invito a hacer, conmigo, un pequeño ejercicio de Comunicación no violenta antes de seguir:

 

 

 

  1. Date unos momentos para conectar con tu cuerpo.

 

Noto el corazón agitado y un poco de presión en el pecho.

 

 

 

2.                  ¿Qué sentimientos y emociones están presentes? (puedes usar las listas)

 

Me siento triste y desesperanzada y también noto preocupación.

 

 

 

3.                  ¿De qué necesidades te hablan estas sensaciones y sentimientos? (puedes usar las listas).

 

Me hablan de esperanza, cuidado, ayuda, protección, cambio, seguridad, tranquilidad.

 

4.                  ¿Quieres pedir o pedirte algo?

 

Me pido tenerlo muy presente y compartirlo para que la gente tenga esta información y no caigamos en ese error.

 

 

 

Esta frase final es el motivo principal por el que he compartido contigo este cuento, porque quiero tener muy presente que, si no son ellas las que rompen el capullo, no van a poder volar. Y donde escribo mariposas, podría escribir hijxs, alumnxs, amigxs, compañerxs…

 

Porque, me he dado cuenta, gracias al apoyo de mis asesorxs y compañerxs formadoras de CNV que hay una Ariana en mí que por ahorrar sufrimiento a lxs demás, a veces les priva de aprendizajes importantes, que por querer cuidar no favorece el empoderamiento.

 

Llegar a ver mi Ariana me causa mucha tristeza porque para mí es súper importante cuidar y apoyar a que las personas nos empoderemos y seamos libres, autónomas y responsables, ayudar a crear relaciones sanas des de la interdependencia y el apoyo mutuo, des del me cuido y te cuido. Y darme cuenta de que, a menudo, he podido caer en la sobreprotección limitante, me duele e impacta mucho.

 

Afortunadamente este impacto está sirviendo para impulsar un cambio en mí, conectar con las Necesidades de las que me habla (cuidado, apoyo, libertada, autonomía, interdependencia, empoderamiento), me sirve de brújula y motor para seguir evolucionando … y, además, me siento confiada y tranquila porque no estoy sola en este camino, tengo el apoyo de la Comunicación no violenta, de mi pareja y de la comunidad CNV. Doy gracias por todo ello y a todxs ellxs…              

 

Cuando detectamos inercias, patrones que nos limitan y queremos cambiar, a veces ayuda mucho tratar de indagar de dónde nos vienen, para qué hacemos lo que hacemos, qué necesidades intentamos cubrir… Digo a veces porque no siempre puede servirte empezar por ahí… Por si te vale, quiero explicarte que, en este caso, después de darle unas cuantas vueltas sobre de dónde me viene esta tendencia a anticiparme y no dar espacio a que la otra persona pida por sí misma. He visto que, ahora, no me hacía bien, que entraba en un bucle de culpa bastante paralizante. Así que he decidido optar por otra vía y probar qué pasa cuando actúo de forma diferente, qué pasa cuando me muerdo la lengua y espero a que la otra persona pida ayuda, qué pasa cuando me quedo quieta observando en vez de lanzarme a ayudar. Y me está sirviendo mucho, estoy viendo cambios en mí y en mi entorno y me siento muy animada y más compasiva con mi Ariana que sigue ahí...

 

Me encantaría saber cómo cuidas tú de las mariposas, si te ves reflejadx en Ariana, si te sirve leer cómo estoy haciendo este proceso de cambio de patrones, cómo lo haces tú…seguir practicando la comunicación no violenta con vosotrxs me nutre muchísimo, gracias por estar ahí.

 

Que tengáis un feliz día 🦋🌻🤗🦋

 

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