Comunicación no violenta pasos


 

LA COMUNICACION NO VIOLENTA EN CUATRO PASOS:

 

Marshall B. Rosemberg estableció los cuatro pasos que se siguen para conseguir una comunicación no violenta (CNV) : 1) Obsevacion. 2) Sentimiento. 3) Necesidad. 4) Petición.

 

Estos cuatro pasos conforman el análisis de la conversación. Una vez incorporados a nuestra manera de hablar, se realizan de manera automática y fluida.

 

OBSERVACION:

 

Al iniciar la conversación, describe los hechos, lo que ves, sin juzgar. Cuando juntas hechos y juicios, el interlocutor suele oponer resistencia, al verse afectado por los juicios previos.

 

Ej. "Pedro; no eres puntual" lleva un juicio incorporado, si describimos sólo los hechos eliminamos el juicio: "Pedro; has llegado tarde a las dos últimas reuniones".

 

SENTIMIENTO:

 

En este segundo paso expresa lo que sientes, es decir habla de cómo te están afectando los hechos. Al hablar desde el corazón te vuelves más vulnerable y de alguna manera predispones al interlocutor a un diálogo más cercano, en el que no necesita "defensas".

 

No es tan sencillo debido a nuestras creencias. En general estamos educados para manifestar fortaleza en todo momento.

 

Ej: "Me siento decepcionado cuando llegas tarde", en lugar de: "Me decepcionas cuando llegas tarde".

 

NECESIDAD:

 

Busca la causa que provoca tus sentimientos. Lo que sientes nace de una necesidad tuya aunque la provoque el interlocutor.

 

Ej: "Me siento decepcionado cuando llegas tarde, porque sólo tengo 15 minutos para preparar la reunión". Al expresar tu necesidad, se entienden las razones de la petición posterior.

 

PETICION:

 

Cuando sigues los pasos anteriores, la petición suele surgir fluida, natural. De otra manera se convertirá en exigencia, y provocará en tu interlocutor sumisión o rebeldía en mayor o menor grado dependiendo de la petición.

 

Debes formularla en positivo, pidiendo lo que quieres, no lo que no quieres. Cuanto más clara sea la petición más posibilidades tienes de obtenerla. El interlocutor debe entender con claridad el tipo de respuesta que esperas, y el beneficio para ambas partes.

 

Ej: "Me gustaría que llegues a la hora prevista y así disponer de 15 minutos de tiempo para preparar la reunión".

 

 

Ahora llega el momento de esperar la respuesta de tú interlocutor dándole la oportunidad de expresar lo que ve, siente y necesita para establecer un diálogo empático, con mejores resultados de los que cabría esperar de una conversación tradicional.

 

Los ejemplos son a propósito excesivamente simples para captar lo esencial de la aplicación de la CNV a una conversación. La práctica continuada con interlocutores "amables", nos entrenará para poder aplicarla a situaciones o negociaciones más complejas.

 

El esquema puede aplicarse a la comunicación personal, y a la comunicación con equipos o grupos de personas, con las adaptaciones necesarias pero con los mismos 4 pasos de la comunicación no violenta.

 

Comunicación No Violenta: Los cuatro pasos de Marshall Rosenberg para fomentar relaciones humanas sanas y asertivas.

¿Algunas vez escuchaste hablar de la comunicación no violenta de Marshall Rosenberg? En este post te explicamos los cuatro pasos para aplicarla en tus relaciones. Las claves: Describir, expresar y pedir. ¡Continúa leyendo! Y recuerda que puedes dejarnos tus comentarios más abajo.


¿Qué es la comunicación no violenta de Marshall Rosenberg?

La Comunicación No Violenta  fue ideada por Marshall Rosenberg, mediador, educador y terapeuta que buscaba encontrar una forma de comunicación para utilizar una comunicación más asertiva, cuidadosa y coherente con nuestros valores personales y reduciendo conflictos innecesarios o dañinos . De esta forma se evita una comunicación tóxica o despertar emocionalidades que no permiten establecer una conexión sana entre dos o más individuos.

Algunos profesionales critican su nombre al estar descrito en negativo o contener la palabra violencia. Otra forma de ver esta cuestión es que su título da énfasis a que el lenguaje puede hacer daño y es bueno ser consciente del poder negativo de las palabras según su uso. También es llamada Comunicación Colaborativa o Compasiva. Es una herramienta para fomentar relaciones sanas con base en una comunicación simétrica, asertiva y empática.

Los cuatro pasos de la comunicación No Violenta

Estos cuatro pasos permiten estructurar nuestra comunicación y transmitir un discurso lo más limpio posible.

1º paso: Describir objetivamente los hechos

Exponer los hechos de forma objetiva, como si fuesen filmados en video o audio.

“llevas tres semanas llegando tarde a la reunión de equipo, y solo me has avisado una vez, y cuando ya pasaban 10 minutos”

Los hechos son hechos, no son interpretaciones. Se pueden cuantificar y medir.

2º paso. Expresión de los sentimientos

Este paso implica la vivencia emocional.

Aquí ya manifestamos nuestro sentir, solo nuestro sentir sin juicio.

¿Cómo vivo el hecho?

Explicamos nuestra vivencia con las palabras justas, sin minimizar ni exagerar la experiencia que transitamos ante el hecho descrito en el paso 1.

“que llegues tarde sin avisar me pone tensa, no sé qué está pasando, y siento que no me cuidas ni a mí ni al resto del equipo.” 

3º paso: Expresión de las necesidades

En este paso se verbaliza qué es lo que necesito para dejar de sentirme así.

Manifiesto el hecho, mi experiencia y ahora mi necesidad.

No se enfatiza tanto en lo recientemente sucedido, lo hecho, hecho está. Sino que se proyecta a largo plazo.

”Necesito saber si tienes algún problema conmigo, que soy la autoridad, o con el equipo. Necesito sentirme cuidada”

La necesidad a mas sintética mejor.

4º paso: Formulación de la petición

“Así que por favor te pido necesito tu puntualidad o que como mínimo me avises con suficiente antelación.”.

En la petición ya creamos un plan de acción y compromiso para poder avanzar en la relación y que el hecho molesto o desagradable no vuelva a suceder o suceda de otra manera.

10 tips para aplicar los cuatro pasos de comunicación no violenta de Marshall Rosenberg

Existen matices importantes a comentar al respecto a los cuatro pasos de comunicación no violenta de Marshall Resenberg.

A continuación compartimos 10 recomendaciones para favorecerla:

  1. No existe una acusación (por ejemplo, “eres una impuntual crónica»)
  2. No hay interpretación de una conducta externa (por ejemplo, “estas desafiando mi autoridad”)
  3. Se busca una colaboración futura y la paz, no el conflicto.
  4. No se entra en una batalla de palabras.
  5. Se concretiza más que en un intercambio de opiniones defensivos.
  6. La idea es de no atacar, sino de cambiar/transformar un hecho que dificulta una relación.
  7. Se acentúa la responsabilidad de cómo vivo lo que vivo, y de mi necesidad.
  8. Se invita a la responsabilidad del otro. El otro puede hacer algo al respecto.
  9. Y se parte de lo objetivo, de un hecho, no de un juicio, creencia, interpretación o acusación.
  10. Pide la escucha de nuestro interlocutor para un posterior intercambio comunicativo.

Este tipo de situaciones nos las podemos encontrar en nuestra vida personal o laboral. Lo importante es no agravar lo que nos conflictua y ser firmes y claros en lo que queremos.


“La forma en que nos comunicamos con otros y con nosotros mismos, determina la calidad de nuestras vidas.”

Anthony Robbins.

La CNV fue ideada por Marshall Rosenberg, psicólogo, mediador y educador que buscaba cómo acabar con los problemas que generan una comunicación agresiva y deficiente. Estableciendo así, una serie de pautas para hacer que la comunicación sea mucho más asertiva, cuidadosa y coherente con los valores personales. Y así, reducir conflictos innecesarios o dañinos.

La Comunicación No Violenta es también conocida como Comunicación Efectiva. Es una herramienta para fomentar relaciones sanas con base en una comunicación simétrica, asertiva y empática. En concreto, está conformada por cuatro pasos clave: Observar sin evaluar; Identificar y expresar sentimientos; Asumir la responsabilidad de nuestros sentimientos; y, Formular a los demás peticiones conscientes para enriquecer nuestra vida.

Estos cuatro pasos permiten estructurar la comunicación y transmitir un lenguaje saludable.

Paso 1: Observar sin evaluar

Se trata de exponer los hechos de forma objetiva evitando añadir juicios y pensamientos sobre ellos. La CNV dice que debemos observar todo aquello que vemos, oímos o tocamos pero sin enjuiciarlo. No es tan fácil como parece. ¿Cuántas veces te has detenido a analizar cómo actúas y reaccionas cuando sucede un hecho? Casi al segundo aparece un juicio. ¿No es así?.

Paso 2: Expresar cómo nos sentimos

Este paso implica la vivencia emocional. Algo que parece sencillo, pero ¿te has detenido a preguntarte cómo vives el hecho? ¿Cuesta no es así? No nos han educado para pensar en nosotros mismos, sino en los demás. De hecho, cuando hablamos, es probable que, pensemos más en qué es lo que el otro espera de mí, que en lo que yo deseo.

La CNV aboga por mostrar tu sentir sin juicio y expresar la propia vulnerabilidad. ¿Cuántas veces has sido capaz de mostrarte vulnerable sin que por ello te sientas débil? La vulnerabilidad es una competencia que te permitirá vincularte a los demás y establecer lazos mucho más fuertes.

Paso 3: Asumir la responsabilidad de nuestros sentimientos

En este paso se manifiesta lo que necesitas. La comunicación no violenta hace referencia a que tus sentimientos son el resultado de cómo eliges tomarte lo que te dicen los demás. Y es que, los sentimientos dependen mucho de las necesidades.

Rosenberg afirma que: “todos los juicios, críticas y diagnósticos que emitimos, así como las interpretaciones que hacemos de los demás, son expresiones de nuestras propias necesidades” ¿Te has detenido a pensar en cómo cambiarían tus relaciones si expresaras tus necesidades?.

Paso 4: Peticiones conscientes

En la petición ya se crea una acción concreta y formulada en términos positivos, para que el hecho desagradable no vuelva a ocurrir u ocurra de otra manera. En otras palabras, aquello que te gustaría pedir a los demás para que te sientas mejor.

Por lo general, y también, citando a Rosenberg, cuando pides algo, sueles usar un lenguaje más abstracto y no consigues satisfacer tu necesidad. A veces, das demasiados rodeos a una determinada petición, sin darte cuenta que mientras más claro se la comunicación, más probabilidades hay que se satisfagan tus necesidades.

Nuestras 10 recomendaciones para aplicar los pasos de la CNV

  • No responsabilizar, acusar o señalar al otro por un hecho.
  • Buscar una colaboración y entendimiento, no el conflicto.
  • No entrar en confrontación de palabras.
  • Se debe ser concreto y directo, más allá de manifestar opiniones a la defensiva.
  • La idea no es atacar al otro, sino cambiar un hecho que dificulta la relación.
  • Manifestar mis necesidades.
  • Invitar al otro a responsabilizarse y hacer algo al respecto para mejorar la relación.
  • Se parte de un hecho objetivo y no de un juicio, creencia, interpretación o acusación.
  • Ser firme y claro con lo que quieres.
  • No interpretar conductas externas.

El padre de la CNV sostiene que si mantienes relaciones defensivas o violentes contigo mismo, es difícil tener compasión por los demás. Detente a pensar las siguientes cuestiones: ¿Qué conversaciones internas tienes? ¿Qué es lo que dices y cómo lo dices?¿Cómo puedes mejorar la relación en tu entorno?. En Practicando la comunicación no violenta te ofrecemos un curso 100% online que te ayudará a aplicar la Comunicación No Violenta en tus relaciones.